martes, 2 de diciembre de 2014

ePay, Operations Manager

Esta fue, probablemente, una de las mejores y de las peores entrevistas que he hecho.

En mi búsqueda de volver al departamento de Operaciones y, a poder ser, a un cliente final, encontré una oferta de trabajo en ePay, una empresa relativamente pequeña (menos de 100 trabajadores) pero bajo el paraguas de Euronet, uno de los principales proveedores de pasarelas de pago y cajeros automáticos.

Envié mi CV y a la semana siguiente me llamaron para concertar una entrevista. Me iba a entrevistar con 3 personas: dos Senior Operation Managers (en la entrevista descubrí que los dos buscaban a alguien para su equipo) y la responsable de recursos humanos.

Llegué a las oficinas de la empresa. Esta vez sin traje: pantalones de algodón y camisa. Hay que adaptar la indumentaria al perfil de la compañía, y en este caso acerté. Fui a la reunión con los deberes bien hechos: repasé los perfiles en LinkedIn y XING de los entrevistadores. Me sorprendió que dos de ellos llevaran tan sólo dos meses en la empresa y la responsable de RRHH 1 año. La empresa estaba creciendo muy rápido o la tasa de abandono (drop out rate, que dicen los anglosajones) era asombrosamente alta.
Desde el minuto 1 se dirigieron a mí en inglés, cosa que me pilló a contrapié. Tanto los correos electrónicos como las llamadas telefónicas habían sido en alemán.

Empezaron por presentarse y acto seguido empezamos a diseccionar mi currículum. Línea a línea. Me sorprendió un nivel de meticulosidad que hasta ahora no me habría encontrado en ninguna entrevista.
Toda la entrevista fue bastante distendida y en ningún momento tuve la impresión de haber metido la pata con una respuesta.
Llegando al final hablamos sobre condiciones (fecha de incorporación, sueldo, beneficios adicionales, vacaciones, etc.). Un punto negativo es que necesitaban alguien cuanto antes y yo tengo un periodo de notificación de 3 meses (algo normal en Alemania). Quedamos en hablar en el plazo de 2 semanas.

Salí de la entrevista muy motivado. El equipo me gustó, el trabajo parecía interesante, la empresa se encontraba en pleno crecimiento y parecía que mis expectativas salariales encajaban en el sueldo de la posición.

Nada más lejos de la realidad. Al día siguiente un email me informaba de que estaba fuera del proceso. Yo daba por hecho que, como mínimo, pasaría el primer corte. Pero no.

Tras recibir el mazazo uno se queda desmoralizado y deprimido. Contacté con recursos humanos para agradecer el correo e intentar conocer el motivo de la decisión (¿Qué hacer tras ser rechazado en una entrevista de trabajo?). Me dijeron que buscaban a alguien con más experiencia.
Las razones no me convencieron porque durante la entrevista comentaron varias veces que estaban buscando un perfil junior. ¿Fueron en realidad mis expectativas salariales? ¿Fue mi periodo de notificación extremadamente largo? O simplemente es cierto que no daba el perfil. Nunca lo sabremos.

1 comentario:

  1. Yo fui a indra a traves de un master de petroleo y gas para una entrevista. La tal Niurka es la persona mas estupida que te puedes echar a la cara, mirando el wassap y todo. En fin, que me rechazaron porque pedian alguien con experiencia en cliente, profundo conocimiento de las herramientas a usar etc etc... pero despues seleccionaron a una compañera del master que no habia dado un palo al agua en su vida.

    Razon? yo 29 para 30... ella 25...

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